viernes, 29 de agosto de 2014

Doscientas palabras - Frágil

Retire con extremo cuidado el sticker que anuncia la supuesta fragilidad del producto adquirido. No tire la etiqueta, apártela a un costado. Puede necesitarla nuevamente al finalizar el procedimiento. Tiene ahora ante si una caja incolora. Ni muy grande ni muy pequeña, de formas conservadas, sin peso aparente. No la sacuda, tampoco tiene sonido. Confíe, el producto está en el interior del estuche. No se conoce ningún caso de ausencia, extravío o sustracción del contenido promocionado. Comprenderá que la naturaleza del objeto nos impide permitir la prueba previa a la compra en el comercio o local. El paquete que tiene entre sus manos carece de dispositivo convencional de apertura. Verá que no existe punta de ovillo. Para abrirlo no necesita raspar el borde, ni utilizar tijeras. Olvide las cintas decorativas del costado. No podrá jamás abrir el producto sin demoler su caja contenedora. Adelante. Hágalo como le plazca. Aproveche a elegir ahora que todavía puede. Una vez liberado el contenido de nuestra Caja de Amor le será imposible discernir. Por último, antes de exponerse al producto recuerde que el mismo no tiene garantía, ni devolución. Ante cualquier inconveniente derivado de su consumo recurra a la etiqueta que habrá separado previamente.