domingo, 9 de marzo de 2014

Doscientas palabras diarias

Día 67
9-3-14

El juego de la silla

El calor apretaba en la sala de espera del consultorio obstétrico, demasiadas pacientes para un espacio tan pequeño. Mujeres preñadas en distintos estadios de sus embarazos. La humedad ambiente era superior a la de un invernadero.  Las banquetas de cuerina gris transpiraban el sudor de los cuerpos dilatados. Había más traseros que asientos. Algunas mujeres más ágiles se sentaban en el suelo; otras acechaban el descuido ajeno para hacerse de un lugar. Los úteros expandidos apretaban las vejigas. Las visitas al toilette eran constantes, nada le garantizaba a la usuaria que se le guardaría la silla. Resistir era la consigna muda del lugar.  Sin embargo tarde o temprano alguna debía zambullirse en  el baño. Entonces un movimiento de telas, suspiros, y chasquidos terminaba con un orden renovado del lugar. Y vuelta a empezar.
-- ¿Para cuándo espera?-- La nueva vecina preguntaba a su compañera. Y así.
Una de las mujeres, panza puntiaguda emergiendo de un anticuado vestido suelto, observaba la coreografía sin tomar parte en el asunto. Parada desafiaba la gravedad sosteniendo su inmensa humanidad sin necesidad de apoyo alguno.
-- ¿Para cuándo espera?
Esta vez la interpelada era ella. Giró su cara, enfocó la mirada y soltó:
-- Yo no espero nada.

http://www.infonews.com/2014/03/09/sociedad-128351-18-meses-de-prision-por-perforar-los-condones-mundo-loco.php