El último disparo
de
Bibiana Ricciardi
Si
pudiera volver el tiempo atrás no iría. ¿Para qué? A veces sueña que regresa a ese día. Que el jefe lo vuelve a llamar para indicarle el
destino, y él le explica que no podrá cubrir la noticia. Pesadilla recurrente. Cada vez aduce un
excusa distinta. La más común es que no tiene rollos para la cámara. Ridículo, porque ya entonces la
foto era digital, por eso sacó tantas. Una ráfaga, sin apuntar. Los canas sí apuntaron, pero eso lo supo a la noche, en la redacción, cuando vio las tomas en la computadora. En ese momento
no miró. Apuntó sólo una vez. Fue cuando el
asesinato ya había sido consumado. La cara del
pibe estaba reventada. Los ecos de la balacera se mezclaban con los gritos de
los heridos. Él cambió la lente, acercó el zoom, corrigió el foco sobre la nariz sangrante, pero no disparó.
No pudo.
Inspirado
en:
http://www.infobae.com/notas/655524-La-foto-que-Pepe-Mateos-no-se-animo-a-sacar.html