Clínica privada
de Bibiana Ricciardi
Querido bebé mío, tan querido. Mamá
encontró por fin la solución. La ley no contempla tu caso. Hay un vacío legal
respecto de los bebés, y es justamente por esa grieta que podemos meternos. De
hecho hay cierta jurisprudencia porque ya hubo veintidós chiquitos que pudieron
acceder al beneficio antes que vos. Los abogados de la nueva clínica de muerte
voluntaria son geniales. Ellos conocen todas las triquiñuelas, mi alma.
¿Entendés? Qué vas a entender. Si tuvieras la posibilidad de entender, mamá no
tendría que recurrir a los servicios de la institución esta. Tu
abuela dice que ve un brillo en tus ojos, como si hubiera una luz de
comprensión. Ridícula, me quiere hacer dudar. Pero se bien que no debo
flaquear. Conozco mis obligaciones. Una madre debe saber tanto dar la vida como
quitarla a tiempo cuando ésta es un estorbo. ¿Acaso pidió mi chiquito nacer con
su espina bífida?
Inspirado
en: “Holanda abrirá en marzo la primera clínica privada para practicar la
eutanasia”
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/02/06/actualidad/1328552045_894225.html