martes, 14 de agosto de 2012

Día 322 (14.8.12) – Proyecto 150 (palabras) x 365 (días)


Credo
de Bibiana Ricciardi
                La ahijada vestía una bata hospitalaria, la madrina jean, buzo y zapatillas. La pila bautismal era una chata desinfectada con tal fin. El cura frunció el seño. Podía realizar el acto en una clínica, podía tolerar que la bautizada se dializara mientras ocurría la ceremonia, pero le costaba volcar su preciado líquido bautismal en esa extraña pila. Resignado preparó el resto de los elementos, elevó sus ojos hacia la madrina y le preguntó si creía.
                -- Sí, creo.
                -- Repita conmigo: creo en Dios y sus santos evangelios.
                La mujer se negó a hacerlo. Adujo que podía hacer un credo de sus propias convicciones. El hombre transpiró, dudó. Unos pasos más atrás la abogada esperaba el final de la ceremonia para iniciar la demanda por donación de órganos entre personas no vinculadas. El sacerdote se sintió cansado. Bautizó a la enferma renal sin credo, sin sentido y se retiró enojado.

Inspirado en: http://www.clarin.com/sociedad/acto-amor_0_755324529.html