viernes, 13 de julio de 2012

Día 291 (13.7.12) _ proyecto 150 (palabras) x 365 (días)


Pochoclo
de Bibiana Ricciardi

                Entre los estudiantes había un joven que soñaba con Hollywood. Mientras todos se creían capaces de cambiar la historia del cine haciendo películas profundas, él sólo imaginaba thrillers que sus compañeros defenestraban sistemáticamente. La oveja negra del grupo. Lo llamaban el pochoclero porque su cabeza sólo podía pensar en productos taquilleros. Como si el dinero fuera menos importante que la gloria. El muchacho sufría la incomprensión en silencio. Soportaba y agradecía las críticas sesudas de sus pares a cada uno de sus cortos. Anotaba puntillosamente en su libreta hasta el comentario más banal apostando a que a la larga su cine ganaría. Y ganó. Hoy sus películas son traducidas a varios idiomas, y vistas por millones de personas en todo el mundo, pese a las particulares condiciones que exige (en las salas donde se exhibe cada uno de sus nuevos filmes está prohibida la venta de pochoclo) para cada función.