Convivencia
de Bibiana Ricciardi
Hubo un
tiempo en el que el asilamiento no era tan popular. Nadie vivía en islas o unidades
de refugio individual. Las antiguas
civilizaciones preferían vivir de a muchos, rodeados de confort (camas
mullidas, mezclas alimenticias, agua dulce, ropaje, almohadones, transportes individuales).
Las islas se usaban sólo como centros
vacacionales. Alguno de ustedes habrá podido observar ruinas históricas en sus
propios espacios. Sabrán que los humanos pre desérticos preferían vivir en grandes
torres, de a muchos. El valor de una extensión territorial residía en la mayor cantidad de
pares que vivieran en ella. Llegó a haber centros urbanos de millones de
habitantes (esto antes de la gran colisión que redujo la especie a unos cientos
de miles). Congéneres, traigo a este debate elementos de nuestra historia
porque creo que es tiempo de volver a convivir.
No se retiren, escuchen, debemos intentar convivir si queremos evitar la extinción de nuestra
especie.