sábado, 4 de febrero de 2012

Día 131 ( 4/2/12) – Proyecto 150 (palabras) 365 (días)



Destino numérico
de Bibiana Ricciardi
¿Cuánto tiempo puede demorar? Acostumbrado a los cálculos imaginó que aquello no podía llevar más de siete u ocho horas. Siete horas, treinta y seis minutos. El número se le apareció solemne en el medio del cerebro. Las cifras eran compañeras. Siempre habían estado allí bailando en su interior, sin importarles demasiado la temperatura exterior. Setecientos treinta y seis. Lindo, grande, fluorescente. Podía sentir su vibración. Casi que le daba calor. Si pudiera pararse correría a jugarle. Tal vez mañana podría ser millonario. Podría ir al hotel de la plaza y pedir una habitación con calefacción. El número siguió bailando dentro suyo,  y creyó que podría zafar. Intentó mover las piernas pero le fue imposible. Estaban como adheridas al hielo del piso.  No valía la pena. ¿Para qué? Si igual en siete horas y treinta y siete minutos habría muerto congelado. No podía fallarle de ese modo al destino numérico.

Inspirado en: La Nación (4/2/12) – Exterior  “El frío no da tregua en Europa: ya son 250 los muertos”