Vigilia
de Bibiana Ricciardi
Rosa es una abuela del corazón.
Lleva a su nietita apretada fuerte contra el pecho. Viajan en tren con otras
compañeras, todas más jóvenes que ella. Van muñidas de lo que puede ayudarlas a
pasar mejor la vigilia.
Las chicas se pusieron de acuerdo en
cuanto supieron la mala noticia: operaban a la Presidenta en Pilar.
-- No es tan lejos, el tren te lleva
gratis.
-- Si sabés escaparte del guarda.
No podían fallarle. Ella les había
devuelto la dignidad.
Por la ventanilla entra una brisa
aliviadora. Hace rato que dejaron atrás las construcciones precarias agarradas
casi del borde de la vía. Rosa observa ahora las mansiones que asoman cada
tanto entre los árboles. Lagos, piscinas, canchas de tenis. La niña se ha dormido
con el traqueteo, ella acaricia su pelo y se recuerda con cinco añitos, cuando
era Jorge, no Rosa, y su abuela la llevó a despedirse de Evita.
Inspirado en Clarín digital 4/12/12 – Vigilia
de distintas organizaciones frente al Hospital Austral de Pilar donde operan a
la Presidenta de la Nación.
