Argucia femenina
de Bibiana Ricciardi
-- Si tuvieras huevos te plantarías.
-- Los tengo.
-- ¿Sí?
-- Sentido figurado.
-- Sorprendente que una fiscal acepte lo figurado del
sentido. Pensé que tu trabajo consistía justamente en apartar las figuraciones
de los sentidos.
-- No estoy de humor.
-- Ni yo.
-- Si me amaras aceptarías.
-- Porque te amo no acepto. A mí no me es tan fácil olvidar los
ideales.
-- ¿Ideales? Por favor. ¿Y por casa? ¿Dónde quedó tu lucha
revolucionaria?
-- En el único sitio donde podía quedar si quería volver
contigo.
-- Pero qué bello, un lindo culebrón.
-- Culebrón o no, esa es la diferencia, “señora igualdad
entre los géneros”, entre un hombre y una mujer.
-- ¿Cuál? ¿Que los hombres prefieren vivir del sueldo de sus
mujeres?
-- Ahora sí. Lo lograste. Me voy. Pero no porque me lo
pediste para conservar tu puesto, no. ¡Me voy porque ya no te soporto más! Me
voy porque lo decido yo, no el Presidente de la Nación.